El cienpies tuvo una idea. Se escondió detrás de la cucaracha y le dijo: "Cucaracha, cuando el oso se acerque, levántate en el aire y comienza a volar".
La cucaracha hizo lo que le dijo el cienpies. El oso se acercó y la cucaracha voló hacia él. El oso trató de agarrarla, pero no pudo. Mientras tanto, el cienpies escapó y se fue corriendo.
La cucaracha volvió a reunirse con el cienpies y le dijo: "Gracias por ayudarme. Sin tu ayuda, el oso me habría comido".
El cienpies le dijo: "De nada. Somos amigos y nos ayudamos unos a otros".